Esta sexta parada nos trae hasta la ciudad de Cholula en Puebla, donde venimos a comer el Chile en Nogada en uno de los restaurantes más queridos por los poblanos: Ciudad Sagrada.
Ubicado en el centro de este pueblo mágico, el restaurante tiene un jardín y una terraza excelentes para comer por su privilegiada vista a la pirámide de Cholula, la pirámide más grande del mundo.
Podemos decir que el viaje a la cuna del Chile en Nogada es fundamental para poder entender la magia de este platillo y como es costumbre, Ciudad Sagrada no nos iba a fallar.
¿Capeado o sin capear?
En Puebla se resolvieron varias de las dudas que siempre envuelven al Chile en Nogada y el primero es “Capeado o sin capear”.
La receta original de 1821, la que dio origen a esta leyenda, es que el chile es capeado y en Puebla lo conocen como el tradicional.
Se puede pedir sin capear, a este lo llaman “ligero”.
Nos encontramos con un Chile en Nogada tradicional, con los cánones que les da la legitimidad del origen: el relleno impecable con los dos tipos de carne: res y cerdo.
La fruta de temporada está en su máximo esplendor, todo cocinado a la perfección con los frutos.
Un relleno que navegaba entre lo dulce y lo salado sin irse a ningún extremo.
El Chile en Nogada original.
El secreto del Chile en Nogada está justo en la nogada y el de Ciudad Sagrada es impecable.
Hecho de nuez de castilla y vino de consagrar, conserva las texturas de las nueces.
Dulce en su sabor, permite que el vino de consagrar perfume el paladar con delicadeza.
Está coronado por una granada dulce, pero no impositiva, y por un perejil que empezó a mostrar que más que un adorno es un ingrediente, y justo de eso hablaremos en la próxima parada.
Cabe mencionar que el tamaño es perfecto, abundante y bien servido, acompañado de un tequila y un vino rosado, es capaz de deleitar la tarde a cualquiera.
Parada obligada para probarlos, además tiene el encanto de la ciudad de Cholula, muy cerca del centro, para después hacer un recorrido por este pueblo mágico.
